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miércoles, 30 de marzo de 2011

Antonio Machado


Últimos días Machado


Tal día como hoy, hace 70 años, murió en el destierro de Collioure (Francia) el poeta Antonio Machado. Salía desde Cataluña hacia Francia junto con miles de republicanos derrotados que formaban aquella inmensa columna, todavía hostigada por la aviación alemana al servicio de Franco. Iba con su anciana madre, con su hermano José y la compañera de este. En un cuaderno de notas poco conocido y apenas difundido, José, que era pintor, relata los últimos días del poeta.


En los andenes de la estación, todavía peor, porque se sufría el acoso de los gendarmes, que no se ocupaban más que de formar las levas para los campos de concentración, separando a los hijos de los padres y a las mujeres de los maridos. Y todo esto de la manera más bárbara y brutal.


Tras su muerte, su hermano José

encontró un papel con las

últimas anotaciones

del poeta.


En el cuaderno de notas que escribió, ya en Chile, para sus hijas y su hermano Manuel, añade José que "fue un verdadero milagro que escapásemos a las garras de estos esbirros, verdadera vergüenza de la especie humana". Se refugiaron en un vagón arrumbado en vía muerta. "Así fue la entrada del poeta Antonio Machado y la madre, en Francia, gravemente enfermos y sin un solo franco en el bolsillo: casi desnudos, como los hijos de la mar".



Con el horizonte cerrado

Al atardecer del día siguiente, cambió su suerte. "Corpus Barga, uno de los mejores amigos que nos acompañaron en el éxodo, logró llegar a Perpigñan, y regresó (con posibles) para llevarnos al cercano pueblo de Collioure.

El comportamiento de este generoso amigo llegó hasta el punto de coger en brazos a nuestra madre y llevarla desde la estación al pueblo por la ancha calle que lo cruzaba y que terminaba en el mar. Por allí marchamos todos con ellos. Siguiendo este camino, llegamos a la plaza principal, donde, ante un pequeño arroyuelo, se levanta el pequeño hotel Bougnol-Quintana, en el que quedamos alojados".

El último verso de Machado decía así: «Estos días azules y este sol de la infancia»


Era la noche del 28 de enero y aquella sería la ultima morada del poeta. Recibió, del secretario de la embajada española en París, los medios para hacer frente a las necesidades más apremiantes. "Transcurrieron unos días añade José en los que el reposo material pareció aliviarle la afección del corazón. No obstante veía claramente que se aproximaba el final de su vida. Pensándolo decía: Cuando ya no hay porvenir, por estar cerrado el horizonte a toda esperanza, es ya la muerte lo que llega".

"No podía sobrevivir a la pérdida de España. Tampoco, sobreponerse a la angustia del destierro. Este fue el estado de su espíritu el tiempo que aún vivió en Collioure. Sin embargo, unos días antes de su muerte, me dijo ante el espejo, mientras trataba en vano de arreglar sus desordenados cabellos: Vamos a ver el mar.

Esta fue su primera y última salida. Nos encaminamos a la playa. Allí nos sentamos en una de las barcas que reposaban sobre la arena. El sol de mediodía no daba casi calor. Era en ese momento único en que se diría que el cuerpo entierra su sombrabajo los pies".

Al cabo de un largo rato, el poeta, señalando una de las humildes casitas de pescadores, le dijo a su hermano: "¿Quién pudiera vivir tras una de esas ventanas, libre ya de toda preocupación". Después se levantó trabajosamente y, en silencio, regresaron al hotel. Dos días antes de su muerte, escribió una carta a su querido amigo Luis Santullano. Ya inmóvil, en la cama, la muerte le sobrevino la tarde del 22 de febrero, miércoles de ceniza.


«No podía sobrevivir a la pérdida de España ni sobreponerse a la angustia del destierro»


"La noticia se propagó rapidísimamente añade José, y en las primeras horas de la mañana siguiente recibí una emocionada carta del insigne escritor Jean Cassou, solicitando en su nombre y en el de los escritores franceses, que el entierro se verificase en París. Pero, agradeciendo infinito este homenaje de la Francia inmortal, decliné tan grande honor, pues, aunque en esos momentos estaba lejos de los demás hermanos, creí interpretar así los sentimientos de todos, mirando más que nada la sencilla y austera manera de ser del poeta. Y así preferimos que durmiese el último sueño en el sencillo pueblo de pescadores de Collioure".

Y añade José que al entierro se sumó todo el pueblo, con su alcalde a la cabeza. "Pero lo más emocionante fue que seis milicianos, envolviendo el féretro con la bandera de la República española, lo llevaron en hombros hasta el cementerio. Y téngase en cuenta que para realizarlo tuvieron que escapar de la implacable vigilancia del tristemente famoso castillo de Collioure, donde con tan injusto rigor se les trataba".



Madre y niña

Quedó el poeta en la tumba de la familia de una buena señora, amiga íntima de la dueña del hotel. La madre, muy enferma y agotada, yacía en la cama. "Volviendo por un momento a la realidad, me preguntó llena de angustia, mirando al lecho que había quedado vacío: ¿Qué ha sucedido? Traté de ocultárselo. Pero a una madre no se la engaña y rompió a llorar como una pobre niña. Dos días después, sus bellos dulces ojos se nublaron para siempre".

Algunos días después, José halló un papel arrugado en el gabán del poeta. En él había escrito a lápiz tres anotaciones. "La primera reproducía en inglés las palabras con las que comienza el famoso diálogo de Hamlet: "Ser o no ser". La segunda tenía sólo un renglón. Pero en este renglón se veía escrito el último verso que escribió en su vida. Dice así: "Estos días azules y estesol de la infancia".

Y en la tercera y última, Antonio Machado reproducía completos estos versos suyos, ya publicados, pero en los que introducía unacorrección:

"Y te daré mi canción:

Se canta lo que se pierde

con un papagayo verde

que la diga en tu balcón"



Final Guerra Civil Machado

Con el estallido de la Guerra Civil Española marcha a Valencia. Vivió en la localidad de Rocafort desde noviembre de 1936 hasta marzo de 1938 . En 1937 publica La guerra. Entre 1937 y 1939, Machado publica un total de 26 artículos en la vanguardia. A finales de enero de 1939 y ante la inminente ocupación de la ciudad,sale de Barcelona viajando con Joaquín Xirau Palau

en una ambulancia que les fue proporcionada por José Puche Alvarez.

Director General de Sanidad. Tras unos primeros días en Raset (Gerona), pasa su última noche en España, la del 26 al 27 de enero, en Viladasens. En la tarde del día 28 llega finalmente a Collioure ( Francia), en donde muere el día 22 de febrero en el Hotel Bougnol-Quintana. A los tres días, fallece su madre. En el bolsillo de su abrigo se encuentra un último verso: "Estos días azules y este sol de la infancia”

En febrero de 2010 la especialista en Machado, Monique Alonso, hizo público que, poco antes de morir el poeta, la Universidad de Cambridge le había enviado una carta ofreciéndole un puesto en su rectorado. La carta llegó a Collioure al día siguiente de su entierro



LA TUMBA DE ANTONIO MACHADO



La tumba que tanto menosprecia es el resultado de una suscripción popular que se realizó en 1957 bajo el impulso de Pablo Casals y del Comité Antonio Machado de Collioure. El Ayuntamiento del momento cedió gratuitamente y a perpetuidad una ubicación destacada a la entrada del cementerio. En cuanto a mí se refiere, me adhiero plenamente al espíritu que presidió la elección del tipo de sepultura, esto es: la modestia que ennoblece el gesto y engrandece el símbolo. Y creo que Antonio Machado le hubiera cedido, muy gustoso, el mármol y el oro que parecen gustarle tanto. Antes que su opinión, prefiero la sinceridad de los numerosos donativos que se recibieron en cuanto se lanzó la suscripción o el testimonio de los que han continuado visitando desde entonces, de forma oficial o anónima, la tumba de Antonio Machado (Manuel Vázquez Montalbán, Gil de Biedma, José Agustín Goytisolo, Gabriel Celaya, Blas de Otero, Ángel González, Carmen Conde, José Luis Cano y un largo etcétera.)

Al Comité Antonio Machado le sucedió, en 1977, la Fundación Antonio Machado de Collioure, de la que soy presidente de honor. El Ayuntamiento sigue apoyando material y económicamente esta asociación, que honra cada año con diferentes manifestaciones artísticas y culturales la memoria del poeta y con él a todos los exiliados españoles.

Entre las actividades artísticas y culturales, la fundación organiza el Premio Internacional de Literatura Antonio Machado en el que, si mal no recuerdo, Almudena Grandes participó como jurado hace unos años. Dejo que cada uno se imagine todo lo que estos eventos pueden aportarle económicamente a la Fundación y al Ayuntamiento.









Lorena y Susana

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